Pactos con el presente Las maneras de la historia contemporánea
La historia está presente en cada acto público y se le reconoce como algo necesario. Está presente en nombres de calles y plazas, se enseña en todas las escuelas, se plasma en visitados museos. Paradójicamente, esta presencia ratifica el abismo que separa los continentes del pasado y el presente: el conocimiento histórico no es sino portador de referencias al mito de origen; el presente encuentra explicación en sí mismo. Este prejuicio penetra también en el mundo académico. Muchos estudiosos de la realidad social actual omiten casi por sistema las referencias al pasado y se contentan con estudios de coyuntura o estructura. En su supuesta búsqueda de objetividad, muchos historiadores optan por investigar sucesos del siglo pasado o anteriores, pues consideran que los acontecimientos de unos cuantos años a la fecha todavía están muy calientes, especialmente los relacionados con la realidad política.Los investigadores de la Dirección de Estudios Históricos del INAH nos reunimos en marzo de 1990, impulsados por la necesidad de aclarar las maneras en que es factible trabajar la historia reciente o inmediata en México. Sin afán de haber encontrado solución a la pregunta epistemológica de qué es la historia contemporánea o a su contraparte pragmática de cuál es su utilidad, el presente volumen se centra en las formas en que se ejerce el oficio, sus características y productos.