Hacia el año 1931, el arqueólogo Alfonso Caso inició su proyecto de exploraciones arqueológicas en Monte Albán, Oaxaca. Unos meses más tarde, el 7 de enero de 1932, encontró la afamada Tumba 7, localizada en el cementerio norte de la ciudad zapoteca. Al interior de la cámara funeraria descubrió un total de 121 joyas de oro y plata realizadas con técnicas diversas. Entre las mismas se halló este colgante, que simboliza a un águila descendente, representativa del sol del ocaso. De su pico cuelga una mariposa estilizada en la cual se aprecia el símbolo del chalchihuite. Este colgante fue elaborado empleando las técnicas del bajo relieve y la falsa filigrana.