Dinero para el rey El padrón de 1781 y los artesanos de Zacatecas
En 1780, España libra una guerra contra su archienemiga Inglaterra. Los gastos para costearla son cuantiosos y el rey Carlos III pide a sus súbditos un préstamo forzoso para salir del atolladero. En Zacatecas, el corregidor de la ciudad, don José de Miera, es el encargado de recolectar los donativos. Funcionario eficiente, recauda nada menos que 9 165 pesos con siete reales en un mes. Pero la minuciosidad al cumplir su tarea alcanza todavía mayor trascendencia: De Miera elabora un padrón que incluye a 7 195 contribuyentes, pormenoriza el gremio de artesanos o corporación a que pertenece o el oficio al que se dedica cada uno de ellos, la cantidad que aporta y su “calidad” étnica, además de datos que permiten relacionar los donativos con las circunscripciones zacatecanas de donde provienen. Por estas razones y otras más, el documento no tiene parangón en los archivos relativos a la Colonia y resulta invaluable porque brinda nítidas “radiografías” del cuerpo material, social y político de la localidad: calles y barrios urbanos; ranchos, minas y haciendas periféricos; grupos artesanales y oficios que actúan en el mercado laboral; y niveles de compromiso de los estratos más pudientes con la metrópoli.
José Olmedo presenta aquí la versión paleográfica del documento, para mejor analizarlo con ayuda de diversos cuadros, cotejar su información con la de otras fuentes coloniales y destacar su gran potencial cuando haya de escribirse la indispensable historia de los gremios de América Latina.
En 1780, España libra una guerra con su archienemiga Inglaterra. Los gastos para costearla son cuantiosos y el rey Carlos III pide a sus súbditos un préstamo forzozo para salir del atolladero.